Una de las confusiones más comunes en el ámbito de TI y la gestión empresarial es asumir que un sistema de backup orientado al cumplimiento normativo equivale a una estrategia integral de Recuperación ante Desastres (DRP).
Aunque ambos involucran la creación de copias de datos, sus propósitos, alcance y capacidades son radicalmente distintos. Mezclarlos o confundirlos puede dejar a una organización expuesta a pérdidas operativas graves.
🔐 1. Backup para Cumplimiento Normativo
Objetivo principal: Garantizar la retención segura y confiable de información durante períodos extensos, en cumplimiento con regulaciones legales, auditorías o procesos de e-discovery.
Enfoque técnico:
- Almacenamiento inmutable, económico y duradero (por ejemplo: cintas, almacenamiento de archivo en la nube).
- Pensado para preservar datos, no para restaurarlos rápidamente.
Métricas clave:
- Integridad y trazabilidad de los datos en el tiempo.
- Capacidad de recuperación granular (archivos individuales, versiones específicas).
- La velocidad de restauración no es prioritaria.
🚨 2. Plan de Recuperación ante Desastres (DRP)
Objetivo principal: Restablecer las operaciones críticas del negocio lo antes posible tras un evento disruptivo (ciberataque, fallo masivo, desastre natural, etc.).
Enfoque técnico:
- Minimizar tanto el RTO (Recovery Time Objective – cuánto tiempo puede estar inactiva la organización) como el RPO (Recovery Point Objective – cuántos datos se pueden perder).
- Implica replicación continua, snapshots frecuentes, orquestación de entornos virtuales, automatización y pruebas periódicas.
Métricas clave:
- RTO: ¿Cuánto tiempo de inactividad es tolerable para la organización?
- RPO: ¿Cuánta pérdida de datos es aceptable?
🤔 ¿Por qué se confunden?
- Ambos procesos implican copiar información.
- Históricamente, los backups eran la única herramienta de recuperación (aunque lentos e incompletos).
- El término «backup» se utiliza a menudo de forma ambigua, sin distinguir entre retención, restauración o recuperación.
⚠️ El riesgo de usar backups normativos como sustituto de un DRP
Confiar únicamente en sistemas de backup diseñados para cumplimiento como base de tu estrategia de continuidad es un error crítico. ¿Por qué?
- 🕒 RTOs inaceptables: Restaurar desde cintas o almacenamiento de archivo puede tomar horas o incluso días. ¿Tu negocio puede permitirse tanto tiempo fuera de línea?
- 🧾 Pérdida significativa de datos (RPO): Si el backup más reciente fue a las 2:00 a.m. y el desastre ocurre a las 4:00 p.m., podrías perder toda una jornada de trabajo. Los DRP modernos apuntan a RPOs de minutos o segundos.
- 🛠️ Recuperación incompleta: Un DRP no solo restaura archivos, sino entornos operativos completos: sistemas, redes, configuraciones, bases de datos, aplicaciones críticas.
- 🔄 Pruebas difíciles o inexistentes: Los backups tradicionales rara vez se prueban de forma integral. En cambio, los DRP avanzados permiten simulaciones automatizadas, validaciones periódicas y monitoreo en tiempo real.
✅ Conclusión: Dos herramientas distintas para dos necesidades esenciales
Los backups diseñados para cumplimiento son indispensables para la gobernanza de la información, la transparencia regulatoria y la protección legal.
Pero no sustituyen un plan de recuperación ante desastres robusto, diseñado para asegurar la resiliencia operativa y la continuidad del negocio.
Tu organización necesita ambos. Evalúa con seriedad tus requerimientos de RTO y RPO, y asegúrate de contar con soluciones especializadas para cada propósito.